Presentándose al Señor
Romanos 12:1
Ya hemos visto el valor que tiene para nuestras vidas las muchas misericordias que el Señor tiene para nosotros y que producto de ellas deberíamos ofrecernos al Señor.
Hoy veremos en que consiste el que debamos presentarnos como sacrificio vivo.
El significado de "presentarse".
La palabra griega de la cual se obtiene ésta, es "ofrecer", se usaba cuando un pecador "ofrecía", una víctima por su pecado.
El Señor busca de nosotros una decisión de ofrecernos voluntariamente como sacrificios vivientes a fin de vivir en santidad y producir una renovación cada día de nuestra vida integral.
"Sacrificio viviente"
Esto es una ilustración de lo que ocurría en el Antiguo Testamento donde, como ya sabemos, el pueblo de Israel ofrecía sacrificios de animales vivos por sus pecados, bueno ahora el nuevo Israel, o el Israel espiritual es la Iglesia, y la iglesia somos cada uno de nosotros, por ello, el apóstol nos dice que igual ofrezcamos sacrificios agradables al Señor, pero no de animales sino de nosotros mismos, que sea nuestro cuerpo y todo lo que somos, que lo ofrezcamos a él.
Este acto de sacrificio es muy profundo porque implica la consagración del ser humano al Señor, es su entrega, es decir al presentarse delante del Señor y ofrecerse se está eligiendo entre nuestra vida y el Señor.
Ahora bien, en el AT el valor del sacrificio radicaba en la muerte de la víctima, es decir, ella moría para producir vida.
Ahora, no es así, el valor del sacrificio radica en la muerte para producir vida, es decir, cuando nos presentamos al Señor, morimos a nosotros mismos para vivir en el Señor.__________________
"Santo "
La palabra santo en este pasaje nos enseña la segunda etapa de tres, de la consagración o santidad al Señor, veamos, la primera es cuando el Señor nos aparta para él en su mente y somos salvos por lo que Cristo hizo por nosotros y la segunda es cuando somos nosotros quienes nos apartamos en nuestra mente y nuestro corazón para él.
Entonces el objetivo de Romanos 12:1, es invitar a los creyentes a que voluntariamente se ofrezcan al Señor como sacrificios vivos y abandonen completamente el liderazgo de sus vidas para entregárselo al Señor.
"Agradable a Dios"
¿Qué gana el Señor con que nos presentemos como sacrificios vivos ante él? La respuesta está en la misma palabra de Dios en 1 Corintios 6.19-20, el texto nos dice que al momento de confiar en Cristo ya no nos pertenecemos, somos de Cristo, ya que él nos compró.
¿Bueno si ya somos del Señor , que objeto tiene presentarnos donde él?, la respuesta es sencilla, él busca nuestro servicio voluntario, ya que sabe que si nuestros corazones no están comprometidos, nuestras acciones tampoco lo estarán.
Conclusión
Hermano hermana, aunque ya pertenezcamos al Señor, él nos invita a presentarnos ante Él como sacrificio vivo, rindiéndole todo derecho nuestro sobre nosotros mismos a Él.
Claudio Nuñez